El puerto de Barcelona se viste navideño por cuarto año con sus ya tradicionales luces, el mercado gastronómico, su pesebre flotante y la icónica y colorida noria. Sin embargo, esta edición tiene como novedad la apertura de una pista sintética de patinaje sobre hielo de 400 metros cuadrados. El conjunto se ha inaugurado esta tarde en el Moll de la Fusta con el encendido de luces, en el que ha sido el primer acto público del nuevo presidente del puerto, el diputado de ERC Lluís Salvadó.
La ceremonia de apertura ha contado con la actuación del cantante Edu Esteve, del programa Eufòria de TV3. También han puesto la música el Cor de Palau Vincles, un proyecto socio-musical del Palau de la Música, y el Cor Mitjans del Orfeó Català, que ha interpretado piezas tradicionales. El resto de tardes, hasta el cierre del 6 de enero, habrá música con entidades y escuelas de música de los barrios vecinos al puerto en algún momento dentro del horario, de 11 de la mañana a 10 de la noche. Asimismo, habrá otros espectáculos de luz y color que tendrán lugar todos los días a las 17’30 horas.
Además de la noria de 65 metros de altura y la pista de hielo, habrá atracciones para los más pequeños, como el carrusel antiguo y el tren. El pesebre vuelve a alumbrar y flotar sobre el agua, y la gran bola iluminada se podrá transitar por su interior que, junto con el resto del alumbrado navideño que se alarga por el muelle, se constituyen un total de 85.000 luces led.
Como el resto de ediciones, el mercado de comercio y gastronomía será uno de los principales puntos de ‘Nadal al Port’. También regresan los talleres de divulgación, principalmente para niños, relacionados con la actividad marítima y el «Contenidor Solidari», la campaña que cada año organiza la Comunidad Portuaria de Barcelona para recaudar alimentos. Por último, atracados en el Moll de la Fusta estarán el Pailebot de Santa Eulàlia y el Far de Barcelona, que podrán visitarse.
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